Dádiva, regalo o presente
(material o inmaterial), en especial el que un ser superior hace a alguien,
muchas personas nacen con un Don muy especial y especifico.
Del latín donum se desprende el
término don, el cual
expresa la habilidad fuera de lo común o extraordinaria de la que disponen
algunas para personas para realizar determinada tarea.
Visto de ese modo, aquel
que dispone de un don,
también tiene la capacidad, ya sea física
o intelectual, de hacer posible una faena que para la mayoría de la
gente sería extremadamente difícil, cuando no imposible, lo que también puede definirse como un talento especial.
La diferencia que existe entre
las aptitudes que pueden estar presentes en un individuo promedio, es que éstas
se alcanzan por medio de la experiencia
y una práctica permanente, al tiempo que el don por lo general se estima como una destreza innata del ser que lo posee,
aunque, en esa afirmación haya diversidad de pensamientos.
En el plano de la literatura de carácter religioso,
el don está enmarcado en una ofrenda recibida del Espíritu Santo por quienes practican y pregonan
la creencia en Dios. En ese
orden de ideas, cabe mencionar que dentro de la doctrina católica, un practicante adquiere siete dones de
santificación en el instante en que recibe el sacramento del bautismo.
De igual modo, las Sagradas Escrituras también hacen referencia a los
denominados carismas, los cuales son dones otorgados a seres elegidos por Dios para que los empleen a favor de la
humanidad.
Mientras que en el ámbito de la
formalidad el término Don (escrito
de ese modo), se coloca antes del nombre de una persona, a la que se quiere otorgar un grado de importancia dentro
de la sociedad. En este caso, Don suele usarse
como la contracción de la palabra distinguido, calificativo que enaltece el nombre de quien lo recibe. Muchas
personas tienen un Don y no lo saben, y otros desde muy pequeños aprenden a
manejar su Don, muchas personas piensan que un Don de clarividencia, o médium
son dones satánicos, en el ámbito científico los investigadores se lo deducen a
un desarrollo de la inteligencia y los llaman Genios. Los herméticos se lo
atribuyen a un don que proviene de un ser superior o sea Dios; hay personas que
creen y otros o, de la existencias de estos dones, de mensajes que reciben de
entidades Superiores y son canales, emisores para que lo transmitan al hombre
que se convierten en receptores.
Es un tema en donde cada cual
tiene sus ideas; pero si hay personas que son seres súper especiales, y casi
siempre tienen una misión, y también hay cientos de charlatanes que lo que
hacen es engañan a las personas. Sobre todos aquellos que se dicen
clarividentes y solo canalizan desastres y guerras. Y tienen sus seguidores y
otros que están casi en anonimato y son espectaculares. Yo siempre prefiero que
cada quien se haga su propia hipótesis; pero si hay personas que pueden ver más
allá de lo que otros pueden percibir, y todos somos sensoriales, lo que sucede
es que unos lo desarrollan más que otros, porque es el nivel de evolución eso sería
otro tema, el ser humano en su mayoría no
utilizan toda su capacidad cerebro, sino una mínima parte, si el hombre utilizará
todo su potencial este mundo sería otra cosa.
El nivel de evolución y de
aprendizaje del hombre viene marcado en su plan de vida y su misión, pero
podemos ver más allá de esta dimensión, solo debemos comenzar a desarrollar y
activar nuestras células.
Monica Zerpa. Elangelus.
monicaelangelus@gmil.com.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario